Organismos internacionales se reúnen en Washington DC para coordinar acciones
Los días 24 y 25 de enero tuvo lugar en la sede del Banco Mundial en Washington D.C. un encuentro entre Representantes de diferentes organismos internacionales del ámbito tributario, liderados por el Banco Mundial y el CIAT, con el objetivo principal de preparar el terreno para avanzar en la coordinación de una estrategia común que permita brindar asistencia a países de América Latina en forma coordinada, racionalizando los recursos destinados a la cooperación y obteniendo sinergias.
Representantes del Grupo Banco Mundial (WBG), del Centro Interamericano de Administraciones Tributarias (CIAT), del Fondo Monetario Internacional (FMI), de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), del Diálogo Tributario Internacional (ITD), del Acuerdo Tributario Internacional (ITC), de la Sociedad Alemana para la Cooperación Internacional (GIZ), de la Oficina de Asistencia Técnica del Departamento del Tesoro de Estados Unidos (OTA-Treasury), de la Agencia de Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), y de la Fundación Iberoamericana e Internacional para la Administración Pública (Eurosocial) se reunieron en Washington en la sede central del Banco Mundial durante los días 24 y 25 de Enero de 2011 con el objetivo de mejorar el intercambio de información y la coordinación de sus actividades de asistencia técnica en materia de política y administración tributaria a los países de América Latina.
Durante estos dos días, las distintas organizaciones examinaron sus distintos modelos de negocio así como las modalidades de prestación de asistencia técnica en materia tributaria con vistas a buscar la mayor eficiencia y efectividad en sus operaciones. También se organizaron tres paneles de discusión que se centraron en el análisis de las siguientes cuestiones: identificación de posibles solapamientos y duplicaciones en los programas de asistencia técnica y medidas a adoptar para lograr una mejor coordinación y división del trabajo basada en las ventajas comparativas de las distintas organizaciones prestadoras de estos servicios; alineación de las agendas de las distintas instituciones con las prioridades y demandas de asistencia de los países; y explorar posibles mecanismos para mejorar la coordinación de las operaciones tanto en las etapas preparatorias como sobre el terreno.
Hubo un claro consenso sobre los principales puntos en los que debería basarse una acción de coordinación y que serían fundamentalmente los siguientes: la necesidad de eliminar reiteración de esfuerzos a través de la complementariedad de los distintos modelos a la vista de las ventajas comparativas de cada institución; necesidad de acometer acciones conjuntas de una manera progresiva comenzando por la información acerca de las actividades que cada organismo está realizando; promover el intercambio de buenas prácticas y experiencias exitosas en programas de asistencia técnica en materia tributaria; establecer mecanismos sencillos de coordinación evitando complicadas estructuras burocráticas que hagan incurrir a estas iniciativas en fuertes costes de transacción; y tener siempre como referencia fundamental los esfuerzos de colaboración y coordinación a nivel de país.